Leonard Cohen tiene ya 77 años y acaba de publicar un nuevo disco, el doceavo en estudio, en una trayectoria musical iniciada en 1968 con “Songs from Leonard Cohen”, que no ha sido excesivamente prolífica en la cantidad, pero extraordinaria en la calidad.
Es sorprendente y reconfortante como un artista que ya se acerca a lo que se denomina cuarta edad siga grabando discos tan cuidados, con una música tan elaborada a pesar de su apariencia minimalista. Aunque para quienes tuvimos la suerte de verlo en su formidable concierto en Madrid hace casi tres veranos no nos extraña.
“Old ideas”, su nuevo cd, tiene diez canciones compuestas en los últimos años, algunas de las cuales ya había estrenado en sus ultimas giras. Como es habitual en este poeta-músico o músico-poeta, las letras son reflexiones intimistas, filosóficas, sobre la vida, la muerte, el envejecimiento, el amor, la soledad, el sexo, la religión.
Leonard canta-recita-susurra, con una voz desgastada pero hermosa. Por supuesto no es un disco de baile, la melancolía esta muy presente, pero contiene una bellísima música, con arreglos muy cuidados como es habitual en Cohen. Sonidos jazzisticos, de country, de suave folkrock, folksong. Excelentes instrumentistas y coro de voces femeninas, también habitual en sus discos y conciertos y que sin embargo en mi opinión no siempre son acertados.
Hay una canción preciosa, “Lullaby”, que sin duda pasara a ser un referente de sus grandes composiciones y que de por si vale mas que muchos discos que se publican cada año.
No se si esta será la ultima grabación de este gran músico y poeta canadiense, esperemos que no, pero en todo caso disfrutemos con el.
Es sorprendente y reconfortante como un artista que ya se acerca a lo que se denomina cuarta edad siga grabando discos tan cuidados, con una música tan elaborada a pesar de su apariencia minimalista. Aunque para quienes tuvimos la suerte de verlo en su formidable concierto en Madrid hace casi tres veranos no nos extraña.
“Old ideas”, su nuevo cd, tiene diez canciones compuestas en los últimos años, algunas de las cuales ya había estrenado en sus ultimas giras. Como es habitual en este poeta-músico o músico-poeta, las letras son reflexiones intimistas, filosóficas, sobre la vida, la muerte, el envejecimiento, el amor, la soledad, el sexo, la religión.
Leonard canta-recita-susurra, con una voz desgastada pero hermosa. Por supuesto no es un disco de baile, la melancolía esta muy presente, pero contiene una bellísima música, con arreglos muy cuidados como es habitual en Cohen. Sonidos jazzisticos, de country, de suave folkrock, folksong. Excelentes instrumentistas y coro de voces femeninas, también habitual en sus discos y conciertos y que sin embargo en mi opinión no siempre son acertados.
Hay una canción preciosa, “Lullaby”, que sin duda pasara a ser un referente de sus grandes composiciones y que de por si vale mas que muchos discos que se publican cada año.
No se si esta será la ultima grabación de este gran músico y poeta canadiense, esperemos que no, pero en todo caso disfrutemos con el.
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