lunes, 30 de junio de 2014

SUMA FLAMENCA: LA VITALIDAD Y RENOVACION DEL FLAMENCO



Afortunadamente no todos son disgustos y sobresaltos en estos días. En el mes de junio, como viene siendo ya habitual, se ha celebrado en Madrid la SUMA FLAMENCA, que acredita, una vez más, que nuestra capital sigue vibrando con la música flamenca.

Ha habido muchas actuaciones brillantes, en cante, baile, guitarra, jazz flamenco, jóvenes promesas, figuras consagradas, grandes voces históricas… teníamos mucho donde elegir y nosotros optamos por la innovación y el cierto mestizaje.

Por una parte Rosario “La Tremendita” junto con el cantante iraní Mohammad Motamedi y por otra Arcángel y Las Nuevas Voces Búlgaras Laletata. Es cierto que es muy arriesgado el encuentro entre dos músicas aparentemente alejadas como  la flamenca y la persa o la flamenca y la búlgara. Aunque ya Pepe Habichuela hace algunos años grabó un interesante cd con músicos hindúes, The Bollywood Strings, los encuentros más frecuentes han sido con músicos latinoamericanos, cubanos, argentinos, brasileños, portugueses, en los que ha habido de todo, aciertos y desaciertos. Por ello íbamos con expectativas y a ver qué pasaba, aunque teníamos una cierta garantía al ser dos espectáculos ya rodados en bastantes lugares dentro y fuera de España.

Rosario La Tremendita, tiene escasos 30 años, es de Triana y de una larga familia de artistas flamencos. Tiene ya dos discos grabados “A tiempo” y “Fatum”. Canta con una gran voz y una gran fuerza. Es joven y dará mucho juego en el futuro. Motamedi son palabras mayores. Tiene 34 años y una larga trayectoria musical con diversos grupos y artistas iraníes y de Asia Menor y Central. Tiene cerca de diez discos. Si la aparición de La Tremendita fue impactante, la de Motamedi nos dejó al público boquiabierto. Con una voz maravillosa, con una potencia formidable y una enorme capacidad de modulación.

Rosario y Motamedi iban acompañados de instrumentistas flamencos y persas y cuando todo el grupo se ponía a cantar y tocar, parecía que llevaran toda la vida haciéndolo. Todos magníficos, pero un poco más los iraníes.

El espectáculo, titulado “Qasida” sobre textos de García Lorca, de poetas de Al Andalus y árabes, en castellano y en farsi (idioma de Irán) estaba perfectamente integrado, había una autentica fusión, y no caían en la yuxtaposición un tanto forzada que a veces encontramos en las iniciativas de músicos de diferentes tradiciones. El concierto, en la primera parte alternó interpretaciones de Rosario y su grupo y de Motamedi y sus músicos y paulatinamente fueron actuando todos juntos en un intenso crescendo que enloqueció al público.

La ovación fue impresionante. Hubo bises. Más ovación. Rosario, Motamedi y todos los músicos estaban emocionados e impactados por la acogida. No era para menos.

El espectáculo de Arcángel con el coro de voces búlgaras, fue bien bonito, pero otra cosa. A estas alturas poco nuevo se puede decir de este cantaor de Huelva, de 37 años, con una intensa trayectoria acompañando a otros artistas y desde hace ya tiempo en solitario, con varios magníficos cds propios y una buena lista de premios y reconocimientos. Su voz, su físico y su simpatía recuerdan a Camarón y es posible que algún día se acerque a la altura de aquel.

El concierto titulado “Estruna”, no avanzaba tanto en la fusión cultural, sino que se mantenía sobre todo en el acompañamiento del coro de Voces Búlgaras, que hacía un contra punto bellísimo a las interpretaciones de Arcángel y su grupo. El Coro también protagonizó algunas interpretaciones acompañado por las guitarras flamencas del grupo de Arcángel y aunque es una música que puede resultar algo más árida, poco a poco se fueron animando y al final también lograron una buena integración con la música flamenca. El público, en todo caso, jaleaba a Arcángel que tuvo una noche esplendida, aunque algo corta y a pesar de dos bieses supo a poco.

En definitiva dos estupendas oportunidades para comprobar la vitalidad de la música flamenca, con dos espectáculos renovadores, que dicho sea de paso han cosechado triunfos y buenas críticas en otros países. Y aquí ni siquiera tuvimos la oportunidad de que los grabaran las Televisiones Públicas para su difusión masiva. Es una desgracia el desinterés que sigue existiendo en amplios sectores de nuestro país por nuestra música y el débil apoyo institucional que reciben estos grandes artistas.

Si tenéis ocasión de ver estos dos espectáculos, no lo desaprovechéis, saldréis encantados. Y a esperar los conciertos flamencos de otoño.




jueves, 26 de junio de 2014

LA REFORMA FISCAL DEL PP Y LOS HERMANOS MARX




El gobierno y el PP ya se han puesto las pilas. Han tomado buena nota de sus resultados en las elecciones del 25 de mayo y están trabajando para ganar las que se realizaran el próximo año. La llamada reforma fiscal es una de sus bazas fundamentales.

A casi nadie le gusta pagar impuestos y el anuncio de una reducción supuestamente generalizada de los mismos, a mucha gente le habrá parecido una buena noticia. Si a ello le añadimos la machacona insistencia en que estamos saliendo de la crisis y que el tiempo de recortes ha terminado ya, la conclusión es evidente: tenía razón Rajoy cuando pidió sacrificios y también cuando anunció que gracias a su responsabilidad y buena gestión, pronto se saldría del huracán.

Creo que lo mejor resume esta supuesta reforma fiscal es una inolvidable escena de la película “Los Hermanos Marx en el Oeste”. En las taquillas de la estación de tren, Harpo y Chico despluman a Groucho, con un ingenioso truco en el que Chico le va cambiando billetes a Groucho que están atados con una  goma; una vez en su bolsillo, Harpo tira de la goma, se los vuelve a apropiar y Chico se los cambia de nuevo a Groucho, que cada vez esta mas mosqueado, hasta que al final Harpo termina por cortarle el bolsillo del pantalón y se queda con todo. La diferencia es que aquí el Ministro Montoro hace de Chico y Harpo, con una mano nos da dinero y con la otra nos lo quitara.

Pero es cierto que el tema de la reforma fiscal les va a dar mucho juego y por ello es importante que la izquierda tenga algunas ideas claras al respecto y que sea capaz de explicarlas bien a la ciudadanía.

Lo primero que hay que defender es que los impuestos es el mejor instrumento de redistribución de la riqueza y de solidaridad para que todos, y no solo unos pocos, vivamos mejor. Las sociedades mas avanzadas son las que mas impuestos tienen; las mas desarticuladas y atrasadas, las que menos. Es verdad que después de años de repliegue de la izquierda ante el neoliberalismo, decir estas cosas es nadar contra corriente, pero no tenemos otro camino.

En segundo lugar, es evidente que no todas las políticas fiscales son iguales. Hay progresivas y regresivas. Hay exigentes y las hay permisivas. La izquierda defendemos un sistema fiscal progresivo y absolutamente exigente con su cumplimiento, lo que es muy sencillo de diseñar: quien más gana o más tiene, más contribuye y también fácil de ejecutar….si hay voluntad política para ello. Hoy con los avances de informatización, podría ser muy eficaz la lucha contra las diversas formulas de fraude fiscal, pero hay que querer y tener los medios legales,  técnicos y profesionales para ello. La Agencia Tributaria, que crearon los socialistas, es un instrumento teóricamente adecuado, pero que a diferencia de la Seguridad Social no dispone ni de los medios, ni del respaldo político, ni de  las directrices adecuadas para cumplir plenamente con su función.

En tercer lugar, la política fiscal es una herramienta para hacer posible el gasto público: los servicios públicos y las políticas sociales. Los más interesados en el gasto público son las clases trabajadoras en su sentido más amplio. Las minorías de altas rentas pueden conseguir la educación, la sanidad, los servicios sociales o los servicios públicos, comprándolos en el mercado. Tienen dinero de sobra. Los demás no pueden hacerlo o quienes podemos es a costa de grandes esfuerzos y sacrificios. Unas buenas y suficientes políticas públicas para todos, exigen una adecuada presión fiscal.

Y en este marco ¿hacia donde va la Reforma fiscal del PP? A mantener la regresividad, al tratar mucho mejor a las rentas altas que a las medias y al seguir siendo permisivos con la evasión y el fraude. Pero no solo esto. El Ministro Montoro lo que ha hecho básicamente es dejar sin efecto la reforma que aprobaron  nada mas llegar al poder en diciembre del 2011 en lo que se refiere al IRPF. Pero se “ha olvidado” de modificar los incrementos del IVA y tampoco se ha molestado en modificar las regresivas medidas que en el tratamiento del patrimonio y de las sociedades mercantiles adoptó el ultimo gobierno socialista.

Pero quizás lo mas escandaloso, como le han hecho ver a Rajoy las autoridades de la Unión Europea, que no son precisamente de izquierdas, es que con esta reducción de ingresos públicos, el elevado déficit publico de España no se reducirá en la medida de lo necesario y no se cumplirán los compromisos adquiridos con la Unión Europea, salvo que….se reduzca el gasto publico o se suba otra vez  el IVA, o las dos cosas. Rajoy obedece a la Unión Europea cuando le interesa y cuando no le conviene pasa de ella.

Es una reforma por tanto injusta, ineficaz y poco seria, un espejismo motivado exclusivamente por intereses electorales.

Pero hay más. A donde nos lleva esta reforma es a dos posibles alternativas. Si las elecciones generales las vuelve a ganar el PP, en el 2016 habrá nuevos recortes de gasto público o nuevas subidas de impuestos o las dos cosas. Si las gana la izquierda y hay un gobierno de amplia coalición, se vera obligado a subir los impuestos, de manera apreciable, porque no sería viable políticamente para una gobierno progresista recortar aun mas el gasto público.

El PP, que sabe perfectamente la irracionalidad económica y social de esta reforma fiscal, porque han estudiado matemáticas como los demás, argumentan que como la economía se va a recuperar intensa y rápidamente, habrá menos presión fiscal pero mas ingresos al producirse muchísima mayor actividad económica y por tanto el déficit público podrá reducirse, manteniendo e incluso mejorando el gasto público. En otras palabras, los supuestos 9000 millones de euros que van a dejar de pagar la ciudadanía, se compensaran por nuevos ingresos derivados del crecimiento económico. Ponen el ejemplo del primer gobierno de Aznar en 1996-2000, en que aparentemente fue así. Pero hay un matiz muy importante: la crisis de 1993 fue muchísimo mas corta, se perdió mucho menos empleo, apenas se recortaron las políticas sociales y los servicios públicos y sobre todo la salida de aquella crisis fue la burbuja inmobiliaria, algo a lo que solamente gente enloquecida estaría apostando para salir del actual estancamiento.

La izquierda vamos a tener que subir los impuestos, porque deberemos  dejar sin efectos seis años de recortes de políticas sociales y de servicios públicos y a la vez hacer frente a la contención paulatina del déficit público. Y hay que decirlo desde ya. La ciudadanía no es idiota y puede entender y admitir las cosas si se explican con seriedad y rigor. Eso si, tenemos que lidiar con las  manchas de corrupción en la gestión pública, que es el mayor obstáculo para hacer asumible la presión fiscal. La gente puede estar dispuesta a pagar más impuestos, si ese dinero se traduce en mejores condiciones de vida para todos, no en latrocinios de unos pocos. Y por supuesto, mejorando, racionalizando, optimizando la gestión pública

Nos queda todavía una etapa larga y dura de sacrificios para recuperar en un futuro a medio plazo la universalidad y calidad de las políticas sociales y de los servicios públicos. Pero lo que nos diferencia de la derecha, es que nosotros queremos que los sacrificios se asuman de manera equitativa, en función de las rentas y patrimonio de cada uno. Por ello no podemos admitir y tenemos que desmontar esta llamada reforma fiscal, exclusivamente electoralista. No queremos ser Groucho Marx estafados por el listo de Harpo y Chico Montoro.






miércoles, 18 de junio de 2014

PODEMOS: AHORA LES DEMONIZAN


No he votado a PODEMOS, no estoy de acuerdo con la mayoría de sus propuestas, no estoy deslumbrado por su líder. Por ello creo estar legitimado para decir que no comparto en absoluto la demonización a la que están siendo sometidos según va pasando el tiempo desde las elecciones del 25 de mayo, desde la derecha y también desde sectores de la izquierda.

Después de la sorpresa de los resultados electorales, muchos han pasado del amor al odio y otros del desconocimiento a la desconfianza. También hay quienes han visto sus barbas puestas a remojar y se aprestan ingenuamente a fagocitarlos. Como hay los que, con profundas raíces de submarinismo trotskista, se las han prometido muy felices creyendo que ¡por fin! han encontrado terreno fértil donde prosperar.

Y luego están algunos “expertos” en materia electoral, que o bien les llaman “frikies” o los consideran flor de un día.

Creo que hay demasiado oportunismo y/o frivolidad en el tratamiento del fenómeno PODEMOS y que al menos en la izquierda deberíamos intentar analizar con un mínimo de rigor y seriedad.

Lo primero que me gustaría resaltar es lo inapropiado de las críticas que se están produciendo por su accidentada trayectoria de las últimas semanas. Por ello no esta de mas recordar que el Partido Comunista de España, fundado en 1921 fue durante mas de 10 años prácticamente un grupúsculo y hasta 1935, con la inestimable ayuda de la III Internacional, no empezó a tomar tierra en la compleja realidad de la II Republica. El PSOE, fundado en 1879, tardo 10 años en hacer su primer Congreso y nada menos que 31 en obtener diputados. Por no hablar de la irregular trayectoria de organizaciones de la izquierda nacionalista como ERC o el Bloque Nacionalista Gallego. Y por supuesto por no hacer mención al estado comatoso del actual PSC. Todo ello refiriéndonos tan solo al campo de la izquierda.

Así que no creo que nadie este en condiciones de exigir a PODEMOS que en unos pocos meses recorran un camino que todos los demás han tardado años en transitar.

En segundo lugar, me llama la atención las objeciones de inmadurez, de personalismo, etc. que se hacen al actual joven equipo dirigente de PODEMOS, al que incluso el Profesor Elorza compara, en un increíble articulo de El País, con los neonazis de la película alemana “La Ola”.         ¿Nos hemos olvidado de las escabechinas que nos hicimos los comunistas entre nosotros mismos entre 1979 y 1985? ¿O la maniobra de Felipe González con su falsa renuncia en el XXVIII Congreso de mayo de 1979 y su vuelta triunfal a los ruedos cuatro meses después? ¿O la famosa frase de Guerra, “quien se mueve no sale en la foto”? Por no volver al socorrido tema del PSC, donde se presenta un candidato a Secretario General casi a rastras, porque nadie quiere serlo. Que nadie de lecciones a PODEMOS.

También se les esta reprochando a la cúpula de PODEMOS su origen de politólogos universitarios, que se han puesto a experimentar sus conocimientos teóricos y que carecen de cualquier experiencia de gestión. Y yo recordaría el perfil del primer gobierno de Felipe González, la mayoría profesionales del derecho o con trayectoria universitaria a menudo fuera de España y sin ninguna experiencia gestora y sin embargo  tuvieron que apechugar nada mas llegar con el golpismo, la reconversión industrial o el referéndum de la OTAN y los tres retos los ganaron, contra todo pronostico.

Por ultimo, se les acusa de tener financiación del chavismo. No lo sé ni me importa, pero todas, todas, las fuerzas políticas por decencia deberían no usar este escabroso argumento, porque tienen mucho que ocultar al respecto.

Hay que darles un margen de confianza a PODEMOS, para que se organicen, para que decanten sus propuestas tan genéricas y magmáticas, para que se curtan en los recovecos de Bruselas y Estrasburgo, para que tracen sus políticas de alianzas, para que canalicen las demandas de unas bases tan heterogéneas, para que perfilen un nuevo modelo de participación política….

No lo van a tener nada fácil. Porque además les rodearan tiburones, dentro y fuera, que querrán o apoderarse de ellos, o engullirles o destrozarles. Por lo pronto han dado muestras de cierta cintura política, como reflejan algunos rebobines de algunos de sus dirigentes que se cabrearon con portavoces críticos de los Círculos o como demuestra la interesante entrevista a Pablo Iglesias en El País, con unos respuestas muy matizadas en temas difíciles para ellos.

Así que vamos a esperar a ver que pasa y no hagamos pronósticos precipitados en ninguna dirección, por que serían carentes, hoy por hoy, de rigor.

En todo caso, insisto, sintiéndome lejos de ellos, creo que sería un error de la política española apostar por su fracaso. Por el contrario, sin paternalismos condescendientes, también sin concesiones ni adulaciones demagógicas y menos aun buscando “abrazos de oso”, esperemos y deseemos que cumplan un papel positivo para revitalizar las practicas políticas de nuestro país, para acercar a nuevas generaciones y a gente desencantada a la vida política. Sería un inmenso servicio que rendirían a la democracia española.

Dejémonos, por tanto, de demonizar o de manipular y relacionémonos con PODEMOS con madurez política, debatamos con ellos sin complejos, sin competir a ser mas izquierdistas que nadie, escuchemos lo que dicen y veamos lo que hacen.     



viernes, 13 de junio de 2014

DECLARACION DE LA RENTA: MARQUEMOS LA CASILLA DE OTROS FINES SOCIALES


Estamos en la recta final para la presentación de las declaraciones del IRPF, en las que como sabemos hay una casilla para la posible asignación del 0’70% para otros fines sociales. En torno a esta cuestión se ha desatado en los últimos años una cierta polémica, respetable sin duda, pero en mi opinión no exenta de sectarismo o de desconocimiento.

Hay quienes dicen que marcar esa casilla es aumentar aun mas la financiación pública a la Iglesia Católica, que ya tiene otras vías de financiación, por cierto no menores. También se argumenta que con esas subvenciones del 0’70% los poderes públicos delegan sus responsabilidades de sostener las políticas sociales en entidades de carácter privado, aunque sean de índole no lucrativa.

Por mi responsabilidad política en el INSERSO en la década de los 90, he conocido bien el funcionamiento de las subvenciones del IRPF a organizaciones sociales. Fue una de las muchas iniciativas que puso en marcha Matilde Fernández, sin duda una de las ministras del PSOE con mas profundas convicciones socialdemócratas, para sortear la cerrazón de los diversos Ministros de Economía de Felipe González, muy reacios cuando no opuestos a incrementar los presupuestos destinados a los servicios sociales. Con en aquel entonces 0’52% del IRPF, se consiguieron destinar varios miles de millones de pesetas anuales a centros, servicios y programas sociales realizados por las ONGs.

Puede que muchos desconozcan, que aunque inevitablemente siempre había algunos casos de apoyo especial a entidades en la orbita socialista (y después lo mismo cuando ha gobernado el PP), las subvenciones eran sometidas a un rigurosísimo y exhaustivo proceso técnico de análisis previo y a un posterior seguimiento, control y evaluación. En otras palabras no se daban al tuntún, todo lo contrario; yo me pasaba muchas horas leyendo voluminosos expedientes de las solicitudes y debatiendo con mis colaboradores los pormenores de los programas. Y, después,  si no se gestionaban bien se les exigía devolver la subvención.

Gracias a esa actuación se han podido desarrollar numerosas iniciativas de índole social, ampliando sustancialmente la oferta de servicios sociales y mejorando la cobertura de sectores de la población muy necesitados. Hay que resaltar, además, que uno de los requisitos para recibir la subvención del 0’52% (después 0’70%) era conseguir otras vías de financiación pública (de otras Administraciones) o privada, así como disponer de recursos propios aportados por los miembros de las ONGs. Era lo que Amalia Gómez, otra defensora de este programa, llamaba “duros interactivos”. Se generaba, por tanto, una sinergia de recursos muy estimables. 

Habrá quien argumente que esa es una obligación de los poderes públicos. Totalmente cierto. Pero si no se consiguen esos recursos porque los diversos gobiernos estatales, autonómicos o locales, se niegan, ¿que les decimos a las muchas decenas de miles de personas que se benefician del 0’70%? ¿que esperen a que haya un gobierno suficientemente a la izquierda, suficientemente sensible y suficientemente buen gestor, que pueda afrontar esa responsabilidad pública? Pues, no.

La otra objeción es que de estas subvenciones del 0’70%, los principales beneficiarios son entidades religiosas. No es exactamente así, pero es verdad que tienen un gran peso en el conjunto de las subvenciones, sobre todo en los programas relacionados con las personas mayores y la pobreza. Pero que le vamos a hacer, si Caritas, las Hermanas de la Caridad o los Hermanos de San Juan de Dios, por citar tres de las mas importantes organizaciones vinculadas a la Iglesia Católica, tienen una intensa actividad social y reúnen condiciones inequívocas de calidad, profesionalidad y buena gestión. Habrá que dárselo a ellas, ¿o les vamos a penalizar por estar relacionados con la Iglesia? Esto me sonaría a anticlericalismo trasnochadísimo.

No soy creyente, pero tengo ojos y sentido común. Sé lo mucho que ha hecho y hace Caritas. Entre otras cosas lleva mas de 30 años restregándonos sin descanso  a la ciudadanía española la realidad de la pobreza en nuestro país, cuando nadie lo hacía. Sus respuestas  sociales para los colectivos marginados son eficaces, rápidas y “baratas”. En relación a las Órdenes Religiosas, yo invitaría a cualquiera que se diera una vuelta por la residencia de los Religiosos Camilos en Tres Cantos,  en la carretera de Madrid a Colmenar. Las personas gravemente dependientes que todos (residencias publicas y privadas lucrativas)  intentan no coger como sea, están allí perfectamente atendidos. Es mas, las Órdenes Religiosas han sido el sector que mas ha modernizado, mejorado y profesionalizado su gestión en el ámbito de la atención residencial. Seguro que hay excepciones, pero con el apoyo de LARES, la organización estatal  que montaron hace años, han transformado de manera muy positiva la atencion a las personas mayores.

Pero además de las organizaciones religiosas, el 0’70% beneficia a muchas otras organizaciones no gubernamentales en el ámbito de la discapacidad, de la lucha contra la pobreza, de la inmigración y el refugio, de la cooperación internacional, de programas de apoyo a las mujeres victimas de violencia, de enfermos de SIDA, de expresidiarios, de población gitana marginada….y un largo etc.

Programas solidarios que benefician a mucha gente y que además generan empleo.


Son razones más que suficientes para que pongamos la X en la casilla de otros fines sociales. Lo he hecho siempre y lo seguiré haciendo sin la menor sombra de duda.

lunes, 9 de junio de 2014

RENOVACION DEL PSOE: PRIMERO LAS POLITICAS Y DESPUES LOS LIDERES




Cualquiera puede comprender y hasta compartir la tremenda angustia que debe estar asolando a los dirigentes, militantes y simpatizantes del PSOE tras sus resultados de las elecciones del 25 de mayo, que han acentuado el desastre de las elecciones generales de noviembre del 2011.

También es comprensible la urgencia que tienen para salir de la crisis en la que están sumidos, escenificada en la dimisión de Rubalcaba y la convocatoria del Congreso extraordinario. Supongo que por la cabeza de muchos socialistas esta circulando el temor de acabar como el Partido Socialista Griego (dicho sea de paso un partido con muchas menos raíces y homogeneidad que el PSOE).

Esta bien que se hayan encendido todas las alarmas y que tengan prisa para superar  la situación en la que se encuentran; tienen menos de un año para salir a flote. Pero la pregunta que muchos nos hacemos es si no se estarán poniendo antes el carro que los bueyes. Si no se esta priorizando el “quienes” sobre el “que”. Si no se esta buscando un o una Mesías salvador/a, por encima de una propuesta que realmente interese y devuelva la confianza a la ciudadanía y en especial a los diez millones de sus potenciales votantes, que les han abandonado masivamente.

Es cierto que contar con un nuevo equipo dirigente es decisivo en una sociedad tan condicionada mediaticamente (no hay mas que ver el éxito del personalismo de la candidatura de PODEMOS). Sí, resulta imprescindible y urgente encontrar una alternativa a Rubalcaba y su equipo.

Pero ¿cuales son los criterios a seguir en esa renovación? ¿La juventud? ¿La no contaminación con los gobiernos de Zapatero? ¿La capacidad de comunicación? ¿La experiencia, aunque sea limitada, de gobierno? ¿El no haber tenido tan malos resultados electorales como los demás? Es indudable que todos esos factores pesan y deben ser tenidos en cuenta. Sin embargo un partido que pretende liderar primero la oposición y luego el gobierno, debe anteponer sobre todas las demás razones una oferta política y en este caso una oferta política progresista. De lo contrario se caerá de nuevo en el error Zapatero, en cuya elección primaron aspectos interesantes y necesarios, pero secundarios y así acabó como acabó.

A mi me gustaría saber cual es el posicionamiento político de Susana Diez, de Madina, de Pedro Sánchez, de Carme Chacón…en temas tan fundamentales como la política fiscal, la cohesión social, la lucha contra la pobreza, los servicios públicos, el I+D+I, el medio ambiente, las pensiones, la reforma laboral, la lucha contra la corrupción, la eventualidad de un gobierno de coalición con otras fuerzas de la izquierda o por el contrario con la derecha, la reforma de la ley electoral, la forma de afrontar el conflicto territorial en Cataluña y en el País Vasco…etc. y no en base a vaguedades que cualquier progresista puede compartir. Tenemos que saber también la letra mediana y  pequeña.

Se podrá argumentar que la política la marca el partido y que ya se ha concretado en la Conferencia política del pasado mes de noviembre, en la que el PSOE hizo una cierta autocrítica y un suave giro a la izquierda. Esta es una referencia programática evidente, pero no es suficiente.

Insisto, desconozco el posicionamiento político de los posibles candidatos a dirigir el PSOE y si eso me pasa a mi, que estoy desde hace mucho “en el ajo” y tengo muy buenas relaciones con muchos socialistas, no digamos lo que le puede pasar a la inmensa mayoría de la gente.

En mi opinión antes, o al menos a la vez, que un debate sobre la idoneidad del perfil  de los candidatos a liderar el PSOE,  hay que clarificar la política que van a impulsar.

Un líder o una líder ilusionante y una nueva política transformadora, esas son las claves para recuperar la confianza.

Y en esa línea sobran promesas, ensoñaciones y cuentos chinos. La ciudadanía y mas aun la susceptible de votar al PSOE, es gente informada, consciente y sensata y  solo les creerán si lo que proponen tiene visos de hacerse realidad. Tienen que decir la verdad de cómo piensan sacar al país de la crisis, la corrupción y la desafección democrática. No queremos cartas a los Reyes Magos, sino propuestas de cambio progresista, que tengan bien en cuenta todas las dificultades existentes y por llegar, y que se comprometan a mantener si consiguen gobernar.

Ojala los socialistas sean capaces de reorientar su actual proceso de renovación y no se limitan a una mera operación de imagen. El conjunto de la izquierda nos jugamos mucho en este camino.



martes, 3 de junio de 2014

REPUBLICA, MONARQUIA, CRISIS, POBREZA, GLOBALIZACION


Aunque en el último mes de mayo el paro registrado ha disminuido un poquitín, la cifra sigue siendo de 4.750.000 personas y si nos remitimos al paro estimado en la Encuesta de Población Activa, el número de parados estaría en 5.933.000 personas. Por otra parte, según datos recientísimos del Instituto Nacional de Estadística, siguiendo los criterios de medición de riesgo de pobreza establecidos por la Unión Europea, AROPE,  el 27’3% de la población española se sitúa bajo el umbral de la pobreza (8.114 euros/año hogar de una persona, dos adultos 12.171 euros, dos adultos y dos menores 17.030 euros), un 6’2% de la población española, 2.800.000 personas, sufren carencia material severa y en mas de 700.000 hogares no hay ingresos por rentas del trabajo ni por prestaciones públicas de protección social.

Estos son los más importantes y profundos problemas de la sociedad española y por lo tanto los que de forma ineludible y urgente deberíamos resolver. Estamos lejos, muy lejos de una salida de la crisis socialmente equilibrada, solidaria y que reduzca la creciente desigualdad.

En este panorama, por si fueran pocos y sencillos los problemas, surge el debate de si monarquía o republica, si referéndum, si reforma de la constitución, a sumar a los complejos problemas existentes en Cataluña y en el País Vasco.

Siempre he sido republicano, de izquierdas, porque hay que aclarar que hay muchos republicanos de derechas, no nos vayamos a equivocar. Considero que un  modelo de estado republicano es más coherente con un sistema democrático. Igualmente pienso que este no es un tema accesorio y la ciudadanía tiene todo el derecho a pronunciarse sobre qué forma de estado prefiere. Pedir un referéndum es plenamente legítimo. Como igualmente es plenamente legitimo plantear la reforma de la constitución o llenar las plazas de concentraciones a favor de la Republica.

Ahora bien, dicho esto, al menos la izquierda debemos dejar de agitarnos entre nosotros mismos. Ni estamos en el 14 de abril de 1931 ni Juan Carlos es Alfonso XIII. Debemos hacer un esfuerzo de reflexión estratégica, a la que estamos muy poco acostumbrados  (y así nos va) y evitar ser conducidos (y dirigidos) por comentaristas, tertulianos, twiters, etc. Y 

La primera pregunta que tenemos que hacernos, sin demagogia y previa lectura detenida, es si el pacto que hicimos y la Constitución que aprobamos en 1978 sigue siendo o no validos. Porque es inadmisible la frivolidad con la que a veces tratamos el texto constitucional, fruto, en mi opinión, de un profundo desconocimiento del mismo. Creo que es difícil, muy difícil, lograr una reforma constitucional que sea mas progresista que la de 1978, entre otras razones porque la derecha española hoy es mas conservadora que la UCD e incluso hay sectores del PSOE que son mas moderados que en 1978, además de la desafección de CIU que no se produjo entonces. El riesgo es que se produzca una reforma constitucional con tonos regresivos. Por tanto midamos mucho qué hay que reformar, qué pactos hay que configurar para lograr una mayoría cualificada y no abramos una reforma en canal que luego se nos atragante a la izquierda.

La segunda pregunta que tenemos que hacernos es si la monarquía constitucional, que es precisamente lo que tenemos en España, ha sido o no un obstáculo para el desarrollo político, económico y social de nuestro país. En mi opinión, no lo ha sido. Aquí los errores de fondo los han cometido los diversos gobiernos, no el monarca. Quienes han hecho políticas antisociales han sido partidos votados por amplias mayorías ciudadanas.  No tengo especial aprecio a  Juan Carlos, menos aun a la reina Sofía, tan conservadora ella. Pero no tienen responsabilidad en los problemas del país, más allá de meteduras de pata, errores y ciertos abusos. Así que para mí el problema no es la monarquía constitucional, sino que políticas se han aplicado desde la Moncloa y que leyes se han aprobado en las Cortes.

En tercer lugar, la provinciana izquierda española tenemos que abrir la ventana, asomarnos al exterior y pensar que mientras aquí nos enzarzamos en sabrosos debates sobre si son galgos o podencos, con reflexiones más propias del siglo XIX que del XXI, el mundo ahí fuera esta cambiando a una velocidad vertiginosa. China, India, Brasil, Indonesia, México, Nigeria, Sudáfrica, etc. están caminando a marchas forzadas para barrernos productivamente y arrumbar nuestro modelo social, económico e incluso medioambiental. Las grandes multinacionales y los grandes capitales circulan por el mundo y ni siquiera los tímidos esfuerzos de Obama o de la Comisión Europea consiguen un cierto control del capital globalizado. La desregulación del mercado laboral es el gran reto de los trabajadores de todo el mundo y aquí los del 15-M y aledaños confluyen con la derecha cuestionando a los sindicatos de clase, que son los únicos que pueden frenarla y revertirla.

Así que no tenemos otra cosa mejor que hacer que paralizar, dividir y entretener mas aun  a la sociedad española sobre si monarquía o republica, en lugar de abrir el debate sobre los retos que la globalización impone a España y a Europa. No hemos aprendido nada del estimulante debate que hubo en la campaña electoral europea sobre el machismo de Arias Cañete. Vamos camino a que nos vuelva a ganar la derecha.

Por último, la izquierda deberíamos mandar un claro mensaje al actual Príncipe de Asturias, de qué es lo que queremos de el y qué es lo que vamos a exigirle. Situar de manera nítida cuales van a ser las bases de su legitimación política, que en mi opinión se centran en tres compromisos: reforzamiento del funcionamiento democrático y erradicación de todas las formas de corrupción; lucha contra la desigualdad social, por el bienestar social y el medio ambiente; impulso de una nueva modernización del tejido industrial, las estructuras, servicios, dotaciones y recursos del país. Si el Príncipe va en esa línea, bienvenido sea.