Para celebrar la caída de Berlusconi, de la que haré un próximo comentario y aprovechando el fin de semana, lo dedicamos al cine y a la música italiana.Como es sabido Italia ha tenido una larga y fructífera sucesión de grandes directores de cine, muchos de ellos de claro compromiso político y social. Ya desde los primeros momentos de la retirada de los nazis y la caída del fascismo, Rossellini rodó su inolvidable "Roma citta aperta". En la posguerra y en los años 50, esa carga política tuvo también un fuerte contenido de critica social, con los directores del neorealismo y en los años 60 triunfo una generacion de directores, la mayoria muy próximos al PCI, de los que, entre los mas conocidos en España, se puede citar a Visconti, Bellocchio, Bertolucci, Ettore Scola, Pasolini y Francesco Rosi.
Rosi empezó a dirigir cine en 1952, pero su primer gran éxito internacional fue precisamente "Salvatore Giuliano" de 1962. Es una extraordinaria película, que se centra en los últimos años de aquel personaje siciliano que desde 1945 a 1950, en que murió asesinado, desarrollo una autentica guerrilla en la isla italiana.La película se centra en dos aspectos estrechamente ligados y no muy conocidos para el publico español: el movimiento independentista siciliano auspiciado tras el final de la segunda guerra mundial por los terratenientes y la alta burguesía siciliana, con el apoyo de los aliados y en especial de los norteamericanos, preocupados por el papel protagonista que en la resistencia italiana y en los primeros momentos de la liberación tenia el PCI y como vía de evitar que en Sicilia los comunistas y la izquierda llegaran a gobernar, creando para ello una especie una guerrilla, aprovechándose de la miseria y la ignorancia de los campesinos.. Y en segundo lugar, una vez fracasada la intentona separatista, la utilización de esos grupos armados para combatir a los comunistas y sindicalistas siciliano. Su expresión mas brutal fue la masacre de Portella della ginestra el 1 de mayo de 1947 donde Giuliano y los suyos mataron a once personas, incluidos 4 niños e hirieron gravemente a 33. Aquella matanza, y sus repercusiones, convirtieron a Giuliano en un personaje muy incomodo y la democracia cristiana, asentada ya firmemente en Italia y en Sicilia, y en estrecha alianza con la Mafia, decidieron cambiar de métodos para combatir a los comunistas. Giuliano y sus mas estrechos colaboradores sabían demasiado de las connivencias políticas, miliares, policiales y judiciales de la lucha contra la izquierda y fueron quitados de en medio.
La película rodada con una magnifica fotografía en blanco y negro, con sabor a documental, es un prodigio de ambientación, fue rodada en los lugares de los hechos y con personajes del país, con gran rigor histórico y con una evidente finalidad de denuncia, sin caer en lugares comunes ni lanzar grandes parrafadas, con la mera descripción de los hechos. Rosi hizo después otras formidables películas políticas como "Il caso Mattei", "Lucky Luciano", "Cadaveri eccellenti", "La mani sulla citta" o "Cristo si e fermato a Eboli". Esta de "Salvatore Giuliano" no es una película fácil de encontrar, pero la recomiendo; no solo supone un disfrute en el plano cinematográfico, sino que además explica muy bien algunas de las raíces de la crisis de Italia en la segunda mitad del siglo XX y que de hecho, bajo otras formas mas sofisticadas ha llegado hasta nuestros días, como tantas se ha puesto de manifiesto con los gobiernos de Berlusconi.
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