Es jueves santo; hace frío y llueve en casi toda España; las procesiones no pueden salir en Sevilla y los costaleros lloran; la prima de riesgo ha subido a 402 puntos; ha salido el Ministro de Economía en TVE, no le llegaba la camisa al cuello y mas que tranquilizar tenia cara de susto; ahora resulta que a los mercados tampoco les resulta suficiente la llegada del PP al gobierno. Ya esta bien, un poco de buena música para olvidarnos de todo esto.
Miguel Poveda, catalán, que aun no tiene los 40 años, es el mejor cantante de flamenco vivo. Su anterior disco, “Coplas del querer” era una maravilla que le abrió las puertas de la fama, aunque los puretas y talibanes del flamenco lamentaban la deriva artística de Miguel. Ya estarán tranquilos. El ultimo disco, “ArteSano”, es una vuelta a las raíces.
Trece canciones que recorren un amplio abanico estilístico: seguirillas, malagueñas, alegrías, tangos, soleas, sevillanas, fandangos, bulerias y hasta una nana. Tres colaboradores de lujo, las guitarras de Paco de Lucia y de Manolo Sanlucar y la voz de Rancapino (que desgraciadamente no se prodiga mucho). Y la presencia de otros excelentes guitarristas: Parrilla, Juan Ramón Caro, Chicuelo, Jesús Guerrero o Isidro Muñoz. Y las palmas y voces de Las Peligro.
Pero por encima de todos el cantaor en estado de gracia. Miguel que a los 20 años arraso en el Festival del Cante de las Minas de la Unión, logrando la Lámpara Minera, ha grabado hasta hoy diez cds, uno de ellos en directo, incluido un disco en catalán, otro con orquesta y uno dedicado a los poemas del exilio del Rafael Alberti, que le convierten junto al maestro Enrique Morente en el cantaor mas innovador y diverso de nuestra época, siempre bebiendo en las esencias de la mejor tradición flamenca.
Este no es solo un disco de gran flamenco, es además alegre, vital, accesible. Es un disco que todos los amantes de la música deberíamos tener en casa, que se tendría que vender o descargar como rosquillas. Es la mejor música española por un gran artista en plena madurez y que solo tiene una pega, que desgraciadamente solo dura 52 minutos y no los 80 que caben en un cd. No importa, se puede escuchar una y otra vez. Estáis avisados.
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