lunes, 28 de octubre de 2013

LOU REED Y "WALK ON THE WILD SIDE"


Hay canciones o discos que forman parte de la biografía vital de  muchas personas. En mi caso, “Walk on the wild side” de Lou Reed, junto con el lp “The dark side of the Moon” de los Pink Floyd, están estrechamente ligadas a muchas tardes y noches de principios de los años 70, cuando con mis compañeros laboralistas quedábamos en la “casa-cuna” de Cristina Almeida en la calle Justiniano y nos hartábamos de oírlos. O cuando íbamos a bailar a “El junco chino” y pedíamos  que nos pusieran una y otra vez aquella maravillosa canción de Lou Reed.

La he seguido escuchando periódicamente y lo he vuelto a hacer hoy. Sigue conservando el mismo embrujo, potencia y belleza que hace 40 años. Perfecta la voz de Lou, los arreglos instrumentales y la calidad de los instrumentistas. Una de las grandes canciones del rock del siglo XX.

A estas horas se están escribiendo y diciendo muchas cosas sobre Lou Reed, bastantes de ellas exageradas y desde luego sorprendentes, si tenemos en cuenta que la amplísima producción de este músico tuvo un limitado éxito de ventas, sin conseguir nunca que sus lps o cds alcanzaran los primeros puestos de las listas. El propio Lou se hubiera quedado pasmado al ver al día siguiente de su muerte que su foto ocupaba buena parte de la primera pagina de el periódico EL PAIS.

Sí, era un artista de culto, pero con muy relativo éxito. Y es que hay que decir que Lou, junto a discos y canciones extraordinarios, especialmente en la primera mitad de la década de los 70, hizo bastantes tostonazos que el tiempo ha barrido sin remedio. Tanto en lo que respecta a su inicial participación en The Velvet Underground, como en su carrera en solitario.

Tuve ocasión de escucharle en febrero de 1992 en el Palacio de Congresos de Madrid. Estaba de gira presentando su ultimo y aburrido disco, “Magic & loss”, pero como anteriormente no había tenido ocasión de verle, allí que me fui. El concierto no fue de los que me dejaron huella, solo cuando recuperaba sus canciones clásicas remontaba y conectaba con el público, el resto fue realmente pesado.

A la hora de acercarnos a la obra de Reed, hay que diferenciar su faceta como compositor, en la que desde luego fue un fiel trovador del mundo underground, sobre todo newyorkino, pero también de Berlín o de Londres. Sus textos son de una gran intensidad dramática y por ellos desfilan drogatas, camellos, travestis, chaperos, atracadores, la heroína, sadomasoquismo, amores locos, historias de la Factory de Andy Warhol…Se puede decir que fue el primer compositor del rock que abordó estas cuestiones de manera clara y directa.

Pero junto a ese papel rupturista, hay que subrayar la nefasta influencia que Reed tuvo en muchos jóvenes, bastantes de ellos españoles, que a finales de los 70 y principios de los 80 quedaron fascinados por la heroína y por la confusa imagen que daba Lou. Droga, que además de otras consecuencias, tuvo efectos devastadores en la obra musical de Lou Reed. Así que ojo con los discursos apologéticos. Lou se desenganchó, pero muchos de sus admiradores murieron por sobredosis.

Por otra parte su faceta como brillante letrista y compositor no siempre estuvo acompañada  de su capacidad interpretativa o de sus arreglos estrictamente musicales.  La muy irregular trayectoria de Reed tiene mucho que ver con los músicos que le acompañaron. Sus grandes discos son el resultado de la participación de excelentes artistas que le dieron un sólido soporte instrumental.

Así detrás del potente sonido de su mejor lp, “Transformer”, están los arreglos de David Bowie y la presencia de Mark Robson, un fantástico  guitarrista y detrás de su magnifico lp en directo “Rock and Roll animal”, esta otro curtido músico y productor, Steve Katz. El inicio inolvidable de este disco en vivo, con la versión de “Sweet Jane”, es quizás uno de los momentos más impactantes de un concierto de rock de todos los tiempos.

Lou Reed, en mi opinión, abusaba del sonido oscuro, sucio, siniestro, cuyos resultados solo se paliaban cuando le acompañaban buenos guitarristas, y sin embargo cuando le daba por “limpiar” su sonido, e incluso acercándolo al folk rock o al country rock, como es el caso de la deliciosa “Crazy feeling”, los resultados eran estupendos.

Lou Reed nos dejo un montón de buenas canciones, además de las ya citadas: “Berlin”, “Lisa Says”, “Vicious”, “Satellite of love”, “Caroline Says”, “How do you think it feels”, “Sally cant dance”, “, “Charleys girl”, “Coney Island baby”, “I believe in love”, “Banging on my drum”, “I love you”, “Rock and roll heart”…o con The Velvet Underground, “Run, run, run”, “I´m Waiting for the man”, “Heroin”, “Femme fatale”, “White light/white heat”, “All tomorrows parties” o “Who loves the sun” y ya en los años 80, una vez desintoxicado, lanzó discos interesantes como “The blue mask” o “Legendary hearts”, con buenas canciones como “No money dawn”, “September song”, “The gun”, “Don’t talk me about work”, “Waves of fear” o “Turn of the light”.

A principios de los años 90 Reed grabó con, John Cale, su antiguo compañero de The Velvet Underground el cd “Songs for Drella”, con un sonido vanguardista y que siendo interesante y de lo mejor de su tercera etapa musical, no deslumbra ni mucho menos. La ultima grabación de Lou, ya en el año 2011, fue con el grupo de hard rock Metallica, titulado “Lulu”, que pretendiendo ser una especie de opera rock de nuestro tiempo, tampoco resulta convincente.

Lou Reed tuvo un gran acierto en la etapa de madurez personal: casarse con Laurie Anderson, la más brillante música de rock vanguardista de los años 80 y 90, autora de fascinantes discos, para mi gusto mucho mejores que los de la última época de su cónyuge.

Lou Reed, como Bob Marley o como Jimmy Hendrix, va camino de los altares musicales. Yo me quedo con dos maravillosas canciones, “Walk on the wild side” y “Sweet Jane” (en vivo) y del resto ni tanto ni tan calvo.



viernes, 25 de octubre de 2013

LA INVESTIGACION CIENTIFICA "EN LA UVI" Y EL "ADELGAZAMIENTO" DEL SUBMARINO


Abrumados por noticias como la escalada del enfrentamiento político entre Mas y Rajoy, la masiva movilización social contra la reforma educativa, las ilusiones por la mejoría económica o las presiones para la insumisión frente a la sentencia del Tribunal de Estrasburgo sobre los efectos retroactivos de la doctrina Parrot, hay otras noticias que no deberían quedar en un segundo plano. Por ejemplo, el contraste entre el crédito extraordinario para que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas no eche el cierre y el coste de “adelgazar” un submarino recién construido. Contraste muy definitorio de la política de este gobierno.

Es sabido que tradicionalmente el gasto publico (y no digamos el privado) en I+D+I en nuestro país ha sido claramente insuficiente, con el PP y con el PSOE, aunque el gobierno de Rodríguez Zapatero hizo algún  esfuerzo de mayor crecimiento. Cuando empezó la crisis, nuestro gasto publico en Investigación estaba muy alejado de la media de los países desarrollados en relación a la riqueza nacional (PIB), incluso en comparación  a algunos de ellos, el nuestro era menos de la mitad. Este déficit mantenido año tras año, ha sido una de las causas que explican la menor competitividad que siempre ha tenido la economía española.

Cuando tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y del crecimiento especulativo, se planteó la necesidad y urgencia de impulsar otro modelo productivo en España, se señaló como lógica consecuencia dar mucha mayor importancia a la Investigación, Desarrollo e Innovación, tanto por el sector publico como por el privado. No ha sido así. No solamente se ha reducido sustancialmente el gasto en políticas universitarias, o el gasto en investigación en el área de la política sanitaria, sino que la financiación de las instituciones dedicadas al I+D+I y muy en especial al Consejo Superior de Investigaciones Científicas, ha caído en picado.

No solo estamos asistiendo a la expulsión de nuestro país de jóvenes, y no tan jóvenes, científicos e investigadores o a la negativa de regreso de los que ya se fueron hace años y en algún momento se habían planteado volver, es que hemos estado a punto de no poder pagar las nominas y gastos básicos de mantenimiento del Consejo Superior, algo propio de una republica bananera. Solo la amplísima movilización de los profesionales de la investigación, apoyados en declaraciones y posicionamientos de eminentes científicos y hasta las declaraciones de los propios responsables del organismo (que no son precisamente gentes de izquierda), ha conseguido la aprobación in extremis de un crédito extraordinario de 70 millones de euros para no “desenchufar” en la UVI al Consejo Superior.

Sin embargo, hemos destinado 14 millones de euros a un estudio para ver como “se adelgazaba” un nuevo submarino S-80, que ya nos había costado la friolera de 2.100 millones de euros y que ahora necesita ser aligerado de peso para hacerlo viable; operación que nos va a constar 208 millones de euros. En total 3 veces mas que el crédito extraordinario al CSIC. Esto lo vemos en una película de Woody Allen  y nos partimos de risa, pero en la realidad maldita la gracia que tiene.

No voy a discutir, en este momento, la necesidad de dotarnos de este tipo de armamento hoy día en España, ni la evidente contribución que esta inversión supone para mantener la actividad y el empleo de nuestros astilleros, ni el aprovechamiento tecnológico que el diseño y construcción íntegramente en nuestro país de este prototipo puede aportar al resto de la industria y hasta la explicación de que un prototipo siempre puede tener desviaciones en su diseño inicial que exija mayor inversión (de hecho del coste inicial de 1.300 millones de euros se ha pasado a los citados 2.100 millones de euros)….todo ello hasta podríamos darlo por razonable, que ya es mucho aceptar, pero bueno. Lo que desde luego resulta inaceptable es comparar estos dos gastos, “la dieta del submarino” y “la respiración asistida del CSIC”.

Es cierto que el CSIC será de los poquísimos organismos públicos que en el presupuesto del año 2014 tendrá incremento, 50 millones mas, pero en su conjunto habrá pasado de los 850 millones de euros en el año 2008 a 602 millones en el año 2014. Una evolución suicida para la economía y la competitividad de España.

En una etapa como la que estamos viviendo de tremendo ajuste presupuestario, las Cortes Generales, el gobierno y la oposición, la opinión publica, la sociedad española, tendríamos que debatir cuales son las prioridades insoslayables de nuestro país, en temas tan importantes como la I+D+I o la política de Defensa, y dejarnos de chorradas como los desaires protocolarios entre el gobierno de España y el de la Generalitat de Cataluña.


Llama poderosisimamente la atención que mientras nosotros hacemos esta política ramplona y cortoplacista, la derecha y la socialdemocracia alemana están negociando un pacto de gobierno, con mas de 300 políticos y expertos implicados y con una previsión de 2 meses para concretar el programa de gobierno compartido. Ese es un país serio y unos partidos, que mas allá de las discrepancias que unos y otros podamos tener con ellos, dan muestras de rigor y profesionalidad. Deberíamos tomar buena nota. 

martes, 22 de octubre de 2013

LA POLITICA DE INMIGRACION DEL GOBIERNO SOCIALISTA FRANCES: UN CAMINO EQUIVOCADO Y UN MAL EJEMPLO




El pasado domingo la alcaldesa de Izquierda Unida de Navalagamella me comentaba su desesperación e impotencia, ante las demandas de actuación de muchos vecinos de su pueblo, que el Ayuntamiento no podía resolver. La reacción era siempre la misma: no sabían para que habían votado a IU si después no les arreglaban los problemas. Hablamos que es muy posible que esas personas desencantadas y presionadas por la crisis o no volverían a votar o ya no lo harían a IU.

Dos semanas antes, en el pueblo francés de Brignoles el alcalde comunista era barrido con el 53% de los votos por un candidato del Frente Nacional de extrema derecha. Se trata de un pueblo de 17.000 habitantes, cerca de Marsella, con una alta presencia de inmigración.

La crisis, el paro, contra lo que muchos pudieran pensar, no se traduce automáticamente en votos para la izquierda, ni siquiera para la izquierda con voluntad mas transformadora. La evolución del voto obrero en Francia es muy significativo, desde la tradicional fidelidad al Partido Comunista Frances a las candidaturas del Frente Nacional de  Jean Marie Lepen. La extrema derecha ha crecido en Austria, Holanda, Dinamarca, Finlandia o Noruega, no en los barrios de las clases altas o medias, sino en los de las clases populares. No es de extrañar, fue esa también la vía de crecimiento del Partido Nacional Socialista Alemán a finales de los años 20 y primeros 30 del siglo XX.

La perspectiva es complicada, pero hay quienes han buscado fáciles recetas, como el socialista Ministro del Interior Frances, Manuel Valls, alineándose con el discurso xenófobo. Disputar el terreno a la extrema derecha con sus mismos criterios, al final se vuelve en contra de la izquierda, porque se estimula la pelea de “pobres contra pobres”, en lo que prevalece la insolidaridad y el individualismo. No, la alternativa no es palo contra los inmigrantes. Como tampoco lo es, no hagamos demagogia, abrir sin más las fronteras.

No soy tan ingenuo o arrogante de creer que la solución es fácil. Es una batalla en el fondo muy ideológica, muy de defensa de valores y en la que el tiempo juega en nuestra contra, porque llevamos años sin defender claramente unos principios de modelo de sociedad diferentes a los hoy imperantes.

En nuestro caso tenemos una Constitución razonablemente progresista, que ahora sorprendentemente se esta queriendo devaluar en su totalidad. Teníamos una tradición de lucha, que aunque minoritaria en la sociedad era muy activa y creativa, teníamos una clara influencia en los ámbitos de la cultura y del pensamiento…Pero la crisis comunista y el desdibujamiento del PSOE tras tantos años de gobierno con indudables aciertos y grandes errores, nos han hecho perder credibilidad y lo que es peor, vías de interlocución con la gente.

¿Qué podemos hacer para recuperar nuestra influencia social? Hay quienes defienden una vuelta a la radicalidad antisistema con recetas simples como la  refundación constituyente.  Los que solo proponen  consignas ignoran que el mundo de hoy es muy  diverso y complejo, que no se puede ir con frases genéricas, porque luego, como la alcaldesa de Navalagamella, tenemos que ser capaces de poner en marcha las alternativas que habíamos ofrecido. Los señoritos de la derecha agraria española durante la II Republica les decían a los hambrientos campesinos que luchaban por salir de la miseria, “¿No queríais Republica? ¡Pues comed Republica!”

Las clases populares, que en su sentido mas amplio abarcan a la inmensa mayoría de la población, tienen muchos intereses comunes, pero también otros que son diferentes e incluso contradictorios, como es el caso de la política fiscal o las formas de gestionar las políticas sociales, por no hablar de las tensiones inevitables con la población inmigrante. Tenemos que ser crisol de intereses y reivindicaciones, sintetizar deseos y necesidades. Encontrar el mínimo común denominador de las muchas y distintas minorías. No es tarea fácil.

Y sobre todo debemos recuperar en la sociedad los valores morales que caracterizaron a los movimientos burgueses liberales y progresistas del siglo XIX y al movimiento obrero del siglo XX, la ética de los reformadores protestantes y del Concilio Vaticano II. Con lenguaje de hoy, pero con principios enraizados en las mejores tradiciones emancipadoras de la humanidad.

Todo ello con el tamiz feminista. Lo he escrito ya en otros post de este blog: la renovación de la clase política de nuestro país exige un protagonismo de las mujeres. No me confundo. No hablo de políticas imitadoras de hombres, como Cospedal, Ana Mato, Ana Botella, Teofila, Rita Barbera, Rudi, o Aguirre. Como tampoco de Elena Salgado o Rosa Conde.  

Y para empezar deberíamos ponernos de acuerdo, no tanto en los candidatos o en las siglas y coaliciones para las próximas elecciones europeas, sino qué cambios queremos impulsar en la gran conquista que ha sido la Unión Europea, pero en la que hoy la voz de la mayoría de la sociedad tiene poca influencia.

miércoles, 16 de octubre de 2013

DIA INTERNACIONAL PARA LA ERRADICACION DE LA POBREZA: ¡ACTUA!


Hoy se conmemora el ·Día Internacional  para la erradicación de la pobreza y sus causas”. Los convocantes han elegido un lema pleno de significado: “Contra la riqueza que empobrece, actúa”.

Aunque nunca debemos centrar nuestra preocupación solo o principalmente en  la pobreza en los países del mundo desarrollado, siendo ésta mucha mas extensa e intensa en otros muchos lugares del planeta,  tras cinco años de crisis las sociedades desarrolladas estamos conviviendo con dos fenómenos crecientes y contradictorios: cada día mas personas se encuentran en situación o en riesgo de pobreza y a la vez cada vez es mayor el numero de ricos y es mayor su riqueza. Riqueza y pobreza dos caras de la misma moneda que nos llevan a una evidente conclusión, en nuestros países no hay tanto un problema de escasez sino sobre todo de injusta distribución.

Y la crisis ha acentuado la desigualdad. En el reparto del Producto Interior Bruto de España crece la parte correspondiente a las rentas del capital y disminuyen las correspondientes al trabajo. La tarta de la renta se esta repartiendo cada vez peor.

Todo esto que es suficientemente sabido y conocido, nos puede arrastrar a una sensación de impotencia, de que no se puede hacer nada o que lo único que cabe es incrementar la caridad y la beneficencia social. Un querido amigo, hombre luchador como pocos, ya fallecido, un día me dijo que el desde que había caído el Muro del Berlín y se había desmoronado la utopia comunista había empezado a dar limosna a los que pedían por la calle.

Buena parte de la izquierda nos hemos quedado sin aliento transformador. El capitalismo nos ha arrebatado las banderas del estado del bienestar social, de la solidaridad, de la igualdad de oportunidades, desfigurándolas hasta hacer una caricatura de las mismas. Pero muchos de nosotros hemos sido vampirizados  por los neoliberales, hemos aceptado renunciar a la fuerza transformadora de las políticas públicas, de la capacidad del Estado como instrumento de cambio. No solo hemos abandonado la utopia socialista, es que ni siquiera nos aferramos al modelo socialdemócrata que reconstruyó en la posguerra mundial unas sociedades mas justas y solidarias. (Vuelvo a recordar y recomendar la película “The spirit of 45” de Ken Loach).

En cambio los conservadores bien que saben lo útil que es el Estado y las políticas públicas y por ello luchan denodadamente por ganar y gobernar, como lo ha hecho esa excelente política de la derecha que es Ángela Merkel, que sabe perfectamente para qué sirve el Estado, los poderes públicos y en definitiva la política.

Y sin  ese ideal de transformación social, la izquierda no volverá a gobernar y sin la izquierda la lucha contra la pobreza y la desigualdad será imposible.

Pero si la vieja izquierda marxista no somos capaces de organizar la lucha contra la pobreza, la derecha compasiva y los cristianos solidarios tampoco están luciéndose. Han delegado esa tarea en algunas organizaciones meritorias, muy meritorias, como Caritas, Intermon Oxfam o EAPN (Red Europea contra la pobreza), pero la mayoría de la gente se ha retirado del activismo, de la mano de la desmovilización que han fomentado por activa y pasiva las jerarquías eclesiásticas desde el Vaticano a la Conferencia episcopal española.

En mi opinión solo una alianza ética entre católicos comprometidos y la izquierda puede impulsar una estrategia eficaz de lucha contra la pobreza, contra la riqueza abusiva. Un nuevo compromiso histórico contra la creciente desigualdad y por la justa redistribución.

Es en este terreno de la ética, no como principio abstracto, de filosofía etérea, sino como programa de cambio social, donde podemos y debemos encontrarnos quienes desde los principios religiosos o desde la ideología transformadora queremos luchar políticamente y socialmente para otro modelo de sociedad, para avanzar en esa idea de que otro mundo es posible.

El Papa Francisco es una esperanza y una oportunidad que la izquierda no podemos minusvalorar o dejar pasar, como en su día no dejamos pasar las puertas para el dialogo entre marxistas y cristianos que propiciaron, cada uno con su estilo, Juan XXIII y Pablo VI. Hoy ese dialogo es posible y necesario, no ya sobre temas teológicos, ideológicos o de mutuo reconocimiento, sino sobre algo mucho mas tangible, trabajar juntos para erradicar la pobreza de nuestras sociedades.

No es tarea fácil. Católicos comprometidos e izquierda estamos muy desmovilizados y desmotivados. Pero no hay otro camino efectivo para hacer realidad ese lema del Día Internacional para la erradicación de la pobreza y sus causas.




  

lunes, 14 de octubre de 2013

ACOSO A LA JUEZA ALAYA: UN ERROR DE MANUAL




Es muy posible que la jueza Alaya, instructora del procedimiento de los ERES con fraude en Andalucía, sea una persona de ideología conservadora y simpatizante del PP. Con su lenta actuación esta favoreciendo un desgaste político a los socialistas andaluces y un desgaste de imagen a los sindicatos, especialmente a UGT pero también a Comisiones.

Es cierto que hay sumarios y este parece ser uno de ellos, de gran complejidad o de prolija tramitación por el gran numero de implicados en el mismo. Pero esa gran demora, unida a la incansable agitación desde algunos medios de comunicación, generan inevitablemente una indefensión en los imputados y en los que han sido llamados a declarar.  

¿Y si después de todo ese larguísimo y parsimonioso proceso resulta que la sentencia es absolutoria total o parcialmente para los numerosos implicados? ¿Quién recupera la honorabilidad de todas esas personas y más aun de todas esas instituciones políticas o sindicales? Difícil, muy difícil.

Por ello no es de extrañar que haya quienes piensen que la Jueza Alaya esta realizando una instrucción con intenciones políticas.

Dicho esto, me resulta inadmisible que se le monte un pollo a la Jueza a la puerta de los Juzgados por parte de afiliados, sindicalistas e incluso dirigentes sindicales de UGT y CCOO. Esas imágenes, que interesadamente se han divulgado a troche y moche, hacen un flaco favor a los sindicatos, deterioran aun más su prestigio y llenan de argumentos a quienes están desarrollando una amplia campaña de acoso a los sindicatos.

No me cabe en la cabeza como se puede ser tan irresponsable para montar un número de esas características. ¡Ni financiado por Intereconomia! Y encima después de hacer esa cagada, hay quienes  intentan justificarlo en base a la supuesta libertad de expresión o manifestación o asimilándolo a los escraches de penoso recuerdo.

La izquierda metiéndonos en ese terreno llevamos siempre las de perder. Hasta Jueces para la Democracia, una organización nítidamente de izquierdas y que siempre ha apoyado al movimiento sindical, ha tenido que desmarcarse de esa actuación de acoso a la Jueza.

Pero no solo es un grave error de imagen, que no es poco. Es además una falta de respeto democrático. Si consideramos que hay malas practicas judiciales, la opción es el recurso legal y llegado el caso, la denuncia al Consejo del Poder Judicial. Y si no hay respuesta positiva, los cauces parlamentarios, el recurso a los medios de comunicación….etc. pero en definitiva utilizar única y exclusivamente los instrumentos democráticos.

Espero con pavor las próximas encuestas sobre la valoración ciudadana de las instituciones políticas y sociales, para ver lo que piensa la gente de los sindicatos.

No se trata de magnificar lo ocurrido en Sevilla, pero tenemos que reconocer que  hemos tirado piedras contra nuestro propio tejado y que alguna disculpa había que dar al respecto. Por eso es importante que hayan sido los dos Secretarios Generales, Cándido Mendez e Ignacio Toxo los que han salido a condenar esa actuación, eso sí llama poderosamente la atención el silencio de los dirigentes sindicales andaluces. De no haber mediado esa condena de Cándido y Toxo, mucha gente pensaría que además de chorizos somos groseros y faltones. Luego que a nadie le extrañe el voto popular a la extrema derecha, también tiene que ver con errores cometidos por la izquierda política y sindical.

En definitiva en el caso de los ERES de Andalucía, como diría los italianos, a los sindicatos nos falta finura (“manca finezza”).









sábado, 12 de octubre de 2013

LA "MODERACION SALARIAL" DEL MINISTRO MONTORO




Hay una percepción muy generalizada entre expertos, empresarios, sindicalistas, etc. de que la economía española ha mejorado notablemente su competitividad, fundamentalmente por la caída de los salarios. Este es un argumento que incluso el propio Presidente Rajoy ha esgrimido ante los inversores japoneses. Hay también informes de organismos internacionales que han puesto de relieve que la depreciación de los salarios, aunque aumenta la competitividad de nuestras exportaciones deprime el consumo interno en España. Incluso la mismísima patronal ha reconocido que en el año 2013 los salarios bajaran en España (por cierto, vaya morrro, como si la cosa no fuera con ellos).

En esta valoración ha coincidido todo un amplio espectro menos el Ministro de Hacienda, que ha declarado que “los salarios no están bajando sino que están moderando su subida”. Frase digna de Giulio Andreotti, de un seguidor de Maquiavelo o de un consumado sofista.

Conocí a Cristóbal Montoro a finales de los años 90, acompañando a la entonces Secretaria General de Asuntos Sociales, Amalia Gómez. Siempre íbamos a lo mismo: pedirle mas presupuesto para los programas del IMSERSO de acogida de inmigrantes subsaharianos en Ceuta, Melilla y Almería. Tenia gracia verles discutir. Era simpático pero chuleta. Nunca nos hizo caso. Admito que es una persona ocurrente, unas veces divertido, otras provocador. Tiene dos pegas, que no le gusta el cine español y que es Ministro y además de Hacienda.

El personal de las Administraciones Publicas llevan varios años con sus sueldos congelados, a lo que se añade reducción de pluses diversos, supresión de pagas extras, etc. La mayoría de los convenios firmados en el sector privado han pactado subidas entre el 1% y el 2%, es decir por debajo de la evolución del coste de la vida. En bastantes empresas no se ha subido el salario y también ha habido muchas en las que, a condición de mantener las plantillas, han reducido los sueldos, pluses u otras condiciones laborales.

Únicamente en algunas empresas con muy alta rentabilidad y beneficios, los salarios han superado ligeramente la inflación, pero estas han sido la excepción que confirma la regla.

Y a esa evolución negativa de los salarios hay que sumar no solo el incremento del coste de la vida en general, sino también la evolución de otros factores que condicionan la capacidad adquisitiva de los salarios y que vienen determinados por la intervención de los poderes públicos, como p.e. el copago farmacéutico, que se ha incrementado para la inmensa mayoría de la población, el aumento de los costes en las diversas etapas de la educación publica, la desaparición o reducción de bonificaciones para diversos servicios públicos o el incremento de otros precios sometidos a diversas formas de autorización publica por ser  productos de primera necesidad (luz, agua, gas…)-

Esta realidad contrasta con lo que esta sucediendo en buena parte de los Estados de la Unión Europea, con crecimientos salariales muy superiores a los de nuestro país.  Con esta reducción del poder adquisitivo de los salarios, no solo se deterioran las condiciones de vida de la mayoría de la gente, es que inevitablemente se reduce el consumo, la actividad económica y el empleo. Con lo que ese retroceso salarial es una mala receta para salir de la crisis económica. Una cuestión es que haya moderación salarial, algo que vienen defendiendo los sindicatos en los últimos años  y otra bien distinta lo que esta pasando en España.

Aunque quizás Cristóbal Montoro pueda tener algo de razón, porque es posible que haga otros cálculos con una metodología diferente a la que usa el resto: hace la media con lo que están ganando sectores empresariales, ejecutivos, directivos, profesionales liberales, algunos autónomos, etc. y entonces las cuentas cambian. Porque es evidente que la crisis no afecta a una parte de la población de nuestro país, de tamaño no desdeñable, que mantiene o ha mejorado su nivel de vida.

La desigualdad social ha crecido, el número de millonarios ha aumentado. Se siguen vendiendo coches de alta gama, yates, joyas; sigue habiendo restaurantes de súper lujo, vacaciones a los lugares mas exóticos y selectos del mundo, siguen manteniéndose escandalosos bonus para gestores de confianza…. Sí, hay sueldos o ingresos fuera de control fiscal que han crecido y mucho.

Ese es el problema más acuciante de España: de ser uno de los países con mayor cohesión social nos estamos convirtiendo en uno marcado por profundas diferencias sociales. Montoro debería preguntar a sus inspectores de Hacienda que piensan al respecto y dejar de hacer declaraciones que no sé sí son fruto de la ignorancia o de la mera provocación y que incluso han merecido el desmarque de uno de sus antiguos compañeros, el exministro Piqué, al que le queda bastante sentido común, no en balde de jovencito fue comunista. 





lunes, 7 de octubre de 2013

EL TEA PARTY Y LA PERVERSION DE LA DEMOCRACIA NORTEAMERICANA





En la magnifica serie televisiva “El Ala Oeste de la Casa Blanca”, hay dos o tres capítulos que tratan el cierre precisamente de la Administración Demócrata, por un pulso que la mayoría Republicana en el Congreso le lanza al Presidente. Cuando los ví no me podía creer que pudiera suceder aquello, que suponía que incluso buena parte del personal al servicio de la Casa Blanca se marchaban a sus casas sin cobrar un centavo. Obviamente la crisis se resolvía en unos días tras un pacto entre los dos grandes partidos y tras una hábil y favorable negociación del Presidente.

Como en tantas otras ocasiones la realidad supera la ficción y el bloqueo político, administrativo y económico  que han provocado los Republicanos conducidos por el Tea Party es algo realmente inconcebible para la ciudadanía de otros países democráticos. Pero antes de entrar a valorar la actitud de la derecha norteamericana, me gustaría subrayar la complejidad y el calado democrático que tiene el entramado constitucional de los Estados Unidos, al que la izquierda europea a menudo no hemos valorado adecuadamente.

Los padres fundadores de los Estados Unidos, que lucharon no solo para independizarse de la Corona británica, sino también para conformar una sociedad libre (eso sí con esclavos negros y con indios masacrados) establecieron en su Constitución un sistema de contrapesos entre el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial, para evitar riesgos dictatoriales, excesos presidencialistas,  o el desmesurado protagonismo de uno de ellos. Las sucesivas reformas constitucionales, a través de las diversas enmiendas constitucionales, han consolidado esa estricta división de poderes, que es horizontal, pero también vertical entre el poder del Estado, los poderes de los 50 estados de la Unión y los poderes de los municipios. En otras palabras y resumiendo, el poder esta muy repartido en Estados Unidos, cuestión muy distinta es qué grupos o clases sociales acceden o detentan mayoritariamente ese poder y cuál es el papel del dinero en las trayectorias de consecución del poder.

Esos equilibrios de poder tienen indudables ventajas democráticas, pero tienen también sus indudables riesgos, cuando las mayorías parlamentarias son distintas de quien ocupa la Presidencia de la nación y lo mismo en cada uno de los Estados de la Unión. Aunque el juego Congreso/Senado es también otro factor de cierto equilibrio, finalmente el Congreso tiene la llave del legislativo y una mayoría en el Congreso puede paralizar una parte de la acción del gobierno, obligándole a negociar. Lo malo es que esa mayoría asuma posiciones radicales, como esta sucediendo en estos días. Lo que inicialmente es un acertado diseño de equilibrio de poderes, se convierte en una tremenda manipulación y abuso de poder y en definitiva en una perversión del sistema democrático.

Yo comprendo que para muchos Republicanos y para todo el Tea Party tener un presidente de raza negra es un trago imposible de superar, si tenemos en cuenta que hace tan solo 50 años a los negros en algunos estados no se les dejaba ir a la Universidad o mezclarse en los lugares públicos con los blancos. No han aceptado a Obama, al que le han acusado de los cosas mas insospechadas y demenciales, y eso que el Presidente ha hecho una política bastante moderada, mucho mas centrada de lo que le pedían buena parte de su electorado en las campañas presidenciales.

Obama no ha atacado Siria ni ha intervenido en Venezuela o Colombia y esta haciendo gestos para recomponer poco a poco las relaciones con Irán y además ha retirado tropas de Irak y Afganistán. Es decir ha desandado el camino belicista de los Bush. Y ha extendido las políticas de bienestar social, en un tiempo en el que lo que prima es precisamente lo contrario, abordando lo que no quiso o pudo hacer Bill Clinton y entroncando con otro presidente demócrata, Lyndon Johnson que fue muy progresista en lo interno (derechos civiles y política social) y sin embargo muy duro en la evolución de la guerra en Vietnam y la península de Indochina.

Obama ha sido el primer presidente desde los tiempos de Franklin D. Roosevelt que ha sido moderadamente de centro izquierda en las políticas nacionales y también en las internacionales y encima, vuelvo a insistir, negro.

El Tea Party no solo quiere cargarse la reforma sanitaria, busca desgastar y derrotar a Obama y  pretende crear una muralla y blindar el poder de la hoy ya minoría WASP (Blancos, anglosajones y protestantes). Si Obama termina su segundo mandato consolidando sus avances en política nacional e internacional, estará facilitando el camino a próximos presidentes de las minorías emergentes y en especial a los “hispanos”.

Obama se juega mucho con este pulso de los republicanos extremistas, pero a su vez el Partido Republicano arriesga mucho sus posibilidades de acceder a la presidencia en el año 2017. Si sigue permitiendo que el Tea Party les marque la política, el electorado moderado de este partido se lo pensara mucho antes de entregar el gobierno a una gente irresponsable a los que no les importa dañar la economía, el empleo y el buen funcionamiento de las instituciones de su país.







viernes, 4 de octubre de 2013

"EL ESPIRITU DEL 45" DE KEN LOACH


Las películas de Ken Loach siempre me resultan interesantes. La mayoría  me entusiasman, otras no comparto el excesivo pesimismo con el que describe la realidad social y económica, sobre todo de Gran Bretaña, y hay alguna que me irrita, como fue el caso de “Tierra y Libertad”, con una visión totalmente sesgada por su militancia trotskista, de lo que pasó en Cataluña durante nuestra Guerra Civil.

Hace unos meses comenté en este blog su deliciosa película “La parte de los Ángeles” (The Angel´s Share) y ahora acabo de ver su mas reciente producción, la película-documental “El espíritu del 45”, que considero de obligada visión para quienes les interese la historia del siglo XX y mas allá para quienes deseen disponer de algunas claves mas para conocer que es lo que esta pasando y por qué con las políticas de bienestar social en Europa.

Adelanto que no es una película fácil, sobre todo al verla en ingles con subtítulos: traslada mucha información, a veces difícil de asimilar. Es una película netamente política y por supuesto claramente  de izquierdas. Es una película muy alegre y vitalista en su mayor parte, acompañada de música de la época. Y es una película que a mucha gente, a mí el primero, les descubrirá bastantes aspectos de la historia reciente del Reino Unido que no son conocidas en nuestro país.

Por ejemplo la tremenda pobreza que les asolaba precisamente en los años en que el Imperio Británico era más poderoso y rico. Las profundas desigualdades sociales, la desnutrición de los niños, la mortalidad y las enfermedades, las infrahumanas viviendas de la mayoría de la clase obrera, las condiciones de trabajo…contrastando con las cacerías y otros lujos de los ricos. Todo ello mostrado con imágenes bien elocuentes.

La segunda sorpresa que me llevé, es la descripción de los grandes cambios que realizo el gobierno laborista elegido en 1945, al finalizar la Segunda Guerra Mundial, cuando Clement Attlee derrota de manera aplastante nada menos que a Churchill, con un programa abiertamente socialista. La película va describiendo los cambios sociales y económicos, las sucesivas nacionalizaciones, la construcción del Sistema Nacional de Salud y una ambiciosa política de viviendas para las clases populares impulsadas por el Ministro Aneurin Bevan. Todo ello en algo menos de 6 años.

Loach, aunque defiende de manera inequívoca la política y realizaciones del gobierno laborista, también refleja algunos aspectos críticos en su puesta en marcha y todas las imágenes que muestra, algunas de una gran emotividad y fuerza plástica, las apoya en recuerdos y comentarios de personas que vivieron aquella época o expertos de diversas disciplinas que analizan lo que sucedió en ese periodo.

La conclusión es evidente y sencilla: cuando hay ideas claras y voluntad transformadora, un partido político, un gobierno, es capaz de movilizar a la sociedad para impulsar grandes cambios que aparentemente parecen imposibles y remover dinámicas que nunca se habían cuestionado por los gobernantes de turno. Y todo ello en una Inglaterra destrozada en una parte de sus infraestructuras y arruinada económicamente tras el gran esfuerzo de la guerra. Todo un ejemplo para nuestros días, cuando nos dicen que no es posible hacer otra política.

La segunda parte de la película describe el ataque contra el estado de bienestar que crearon los laboristas, por parte  de Margaret Tatcher, que en sus años de gobierno intentó y en parte consiguió desmontar aquellas conquistas económicas y sociales, a pesar de las luchas  y huelgas de los trabajadores, que se encontraron con una dura represión policial.

La película me ha hecho reflexionar muy a fondo sobre los arraigados prejuicios que, como buen comunista, he tenido sobre el laborismo ingles. Tony Blair y otros dirigentes laboristas de las ultimas décadas, nada, pero nada, tienen que ver con aquellos lideres de los años 40 que decían las cosas por su nombre, que no tenían miedo ni vergüenza por aparecer como socialistas, defendiendo una política socialista. Me ha parecido tan interesante e, insisto, tan desconocida para los españoles esa época de la historia británica, que voy a intentar rellenar este vacío leyendo algún libro sobre la misma, aprovechando que muy pronto es mí cumple.

Es estupendo que Loach, que tiene ya 77 años, siga en plena capacidad creativa, aunque lamentablemente esta formidable  película tiene una escasa distribución y pronto desaparecerá de las pantallas españolas. Es una pena. Al menos todas las personas progresistas deberían verla y luego, como en los viejos tiempos de los cine-forum, hacer un debate sobre la misma. Porque, repito, no es historia pasada, es pura actualidad. Así que iros a verla.






martes, 1 de octubre de 2013

MEDICOS CON CONTRATOS BASURA





Nunca pude imaginar que los contratos basura para los médicos iban a ser práctica habitual en el Sistema Nacional de Salud, incluidos  Sistemas Regionales de Salud con gobiernos socialistas.

En los años 80 y principios de los 90 formé parte del Consejo General del INSALUD en representación de CCOO. En los primeros años 2000 participé en el Comité Consultivo del Sistema Nacional de Salud. En aquellos tiempos, sobre todo cuando aun existía el INSALUD, el discurso básico de sus máximos responsables políticos incluía la necesidad de una buena política de recursos humanos, que tuviera satisfechos a los profesionales, ya que ello redundaría en las buenas practicas y buena atención a los pacientes (incluso a estos se les empezó a llamar clientes, para supuestamente reforzar una imagen de máxima exigencia en la calidad de la atención). CCOO a veces criticamos que en algunas ocasiones había un exceso de receptividad a algunas de las exigencias corporativas de los médicos, a diferencia de lo que sucedía con otros profesionales y muy en especial con el personal de enfermería.

Lo que ocurre hoy está en las antípodas de lo que pasaba hace 15, 20 o 25 años y esta generando un malestar masivo entre los profesionales del Sistema Nacional de Salud, en prácticamente todas las Comunidades Autónomas, quizás con la excepción del País Vasco, que siempre ha tenido buenos Consejeros de Sanidad (nacionalistas o socialistas). Es cierto que, aunque minoritariamente,  ha habido abusos, incumplimientos de horarios, actitudes de autodefensa corporativa, derivaciones a consultas privadas, conchaveo con empresas farmacéuticas o de tecnología sanitaria, pero al menos desde los responsables sanitarios se tenía razonablemente claro que era fundamental que los profesionales estuvieran bien valorados y fueran tratados con respeto. Algo que hoy ha desaparecido. Y para no hablar de oídas, me referiré a un caso muy cercano que es suficientemente elocuente de a qué niveles de deterioro de la política de recursos humanos hemos llegado en los Servicios Regionales de Salud.

Mi yerno trabaja en un hospital público de una Comunidad Autónoma con gobierno del PSOE. Es hematólogo, una especialidad muy compleja, con una práctica que resulta decisiva en muchísimos casos para la vida de los pacientes. Es relativamente joven, pero con dos MIR, participaciones en congresos nacionales e internacionales con intervenciones y ponencias altamente valoradas y una dedicación extraordinaria, con una inmensa retahíla de guardias los fines de semana, no deja de estudiar e investigar ni de noche ni de día, incluso en vacaciones se ha pasado por el hospital para el mejor seguimiento de algunos enfermos en situación muy delicada.

Pues bien este medico lleva encadenados un montón de contratos temporales, primero fueron varios por ¡un mes! ahora se los están haciendo por tres meses. Como si fuera un camarero de una discoteca de la Costa del Sol. Ocupa el lugar de una plaza fija y en estos momentos su volumen de trabajo es tal que tiene ya citas hasta el próximo mes de abril y comenta que muchos  días  no puede ni parar 5 minutos a tomarse un café. Y lo mas tremendo, le han confirmado a mediodía del 30 de septiembre la prorroga de otros tres meses, del 1 de octubre al 31 de diciembre. Hasta ese mediodía se habían negado a avanzarle si el martes 1 de octubre seguiría en el Hospital atendiendo a los pacientes, algunos de ellos en estado muy critico.

¿Pero a donde vamos a ir a parar? ¿Es que no tienen vergüenza estos irresponsables gestores de la sanidad pública que pagamos todos? Y aquí no valen excusas de que no pueden cargarse de personal ante una actividad de evolución discontinua o temporal. ¡Hasta abril tiene citas! ¿O es que piensan decirles a los pacientes con cáncer que no saben si les van a poder atender la semana que viene? Lo peor del caso, es que no es el único; no estamos ante el mal funcionamiento de un jefe de servicio o un gerente de un hospital. No, no, son prácticas sistemáticas, conocidas y respaldadas por un consejero socialista, para que luego vengan Rubalcaba y Valeriano Gómez a criticar los contratos basura y la reforma laboral del PP. Y si esto hacen los del PSOE que harán los otros…

Mi yerno a veces piensa  en irse a Inglaterra, donde se trabaja menos, son mejores los sueldos y lo recibirían con los brazos abiertos, debido a su buena formación y su experiencia.

Esta política de Recursos Humanos que confunde un hospital con un chiringuito de playa, es nefasta para miles de profesionales que se pueden preguntar si merece la pena el esfuerzo que hacen para el trato que reciben. Algunos se irán a la privada, otros se marcharán de España, otros se resignarán, acartonarán  y perderán toda ilusión por su práctica profesional, y otros seguirán confiando que algún día las cosas cambien. Y los pacientes a esperar que haya suerte y que su medico en el que confían, no desaparezca un día tragado por la no renovación de su contrato basura.

Este no era el Sistema Nacional de Salud que queríamos, desde luego no él que quería él que fue primer ministro socialista de Sanidad, Ernest Lluch.